viernes, 23 de enero de 2009

Denominaciones de origen boicoteadas

Así como se suele atribuir orígenes extranjeros a ciertos productos (probablemente con el objeto de darles un toque de exotismo), también existe un fenómeno inverso en el que se decide cambiar o quitar el adjetivo gentilicio del nombre de un producto con el fin de boicotear al país en cuestión. Este tipo de cambio lingüístico es muy común durante los momentos más álgidos de algunos conflictos internacionales. Veamos algunos ejemplos.

Freedom fries (papas de la libertad). Es un eufemismo que algunos conservadores estadounidenses usaron para referirse a las papas a la francesa, como resultado del sentimiento antifrancés en Estados Unidos durante la invasión de Irak en 2003. La francofobia era tan grande entonces que unos congresistas ordenaron que se eliminara toda referencia a las French Fries y al French Toast en los menús de los restaurantes de la Cámara de Representantes y que se sustituyera el gentilicio por la palabra Freedom. Como vimos aquí, la lista de nombres de productos en inglés que contienen el gentilicio "French" es amplísima, así que si hubieran ido más lejos habrían tenido que cambiar todos esos términos.

Kiwi fries (papas kiwi). En 1988, cuando el gobierno francés estaba haciendo pruebas nucleares en el Pacífico, en algunos restaurantes de Nueva Zelanda las French fries empezaron a llamarse Kiwi fries, o simplemente fries. Sin embargo, no era muy necesario que digamos porque la mayoría de los neocelandeses usan la palabra británica chips para nombrar ese platillo. Por otro lado, en esa misma época, algunos panaderos neocelandeses cambiaron el nombre del pan francés (French loaves) por Kiwi loaves. De todos modos, este fenómeno no fue tan publicitado como en el caso del sentimiento antifrancés en Estados Unidos.

Café griego. Después de la invasión turca de Chipre en 1974, cuando las relaciones greco-turcas se pusieron tensas, el “café turco” (τούρκικος καφές) se volvió “café griego” (ελληνικός καφές) en los menús de los restaurantes griegos. En otras lenguas, se usaron también eufemismos como “café armenio” y “café chipriota”.

Después del triunfo de Franco, en España aparecieron los siguientes eufemismos:
Filete imperial. Es el nombre que recibió el filete ruso.
Ensaladilla nacional. Así empezó a llamarse a la famosa ensaladilla rusa. Quizá por eso haya tantos que crean que no es rusa.
Caperucita encarnada. Es el nombre que recibió la Caperucita Roja.

Ensalada americana. Debido al fuerte sentimiento anticomunista que hubo en Turquía, la ensalada rusa fue rebautizada en ese país como ensalada americana.

Pastor alsaciano. Durante la Primera Guerra Mundial, los ingleses rebautizaron al perro pastor alemán como pastor alsaciano.

American Eskimo Dog. Durante la Primera Guerra Mundial, los estadounidenses le cambiaron el nombre al perro Spitz Alemán por American Eskimo Dog.

Liberty measles. También durante la Primera Guerra Mundial, a la rubéola, conocida en inglés como German measles (que literalmente significa “sarampión alemán”), se le empezó a llamar en Estados Unidos liberty measles. Ese cambio de nombre me parece absurdo. Si bien la rubéola se conoce con ese nombre en inglés porque fue descubierta por unos médicos alemanes en el siglo xviii, considero que habrían podido dejarle el nombre para que en el inconsciente colectivo los estadounidenses les atribuyeran a los alemanes el origen de ese mal. Pero no todos son tan maquiavélicos como yo...

Café Liégois. En Francia, durante la Primera Guerra Mundial, el Café Viennois (café vienés) fue rebautizado como Café Liégois (café de Liège) debido a la tensión con el Imperio austrohúngaro. Esta denominación se sigue usando todavía, sobre todo para los helados.

Kitchener. De mediados del siglo xix a la primera década del siglo xx, la ciudad de Berlín, Ontario (Canadá), era un animado centro industrial que celebraba su herencia alemana. Sin embargo, cuando estalló la Primera Guerra Mundial dicha herencia alemana se volvió un foco de conflicto. Si bien la mayoría de los colonos eran en realidad menonitas de Pensilvania, como no quisieron ir a la guerra (por su pacifismo), los residentes no alemanes de Berlín empezaron a verlos con muy malos ojos y la tensión incrementó. Este conflicto llevó a que, en 1916, después de un referéndum se cambiara el nombre de la ciudad por el de Kitchener (en honor a Lord Kitchener, entonces ministro británico de guerra que murió en las Islas Orcadas).

Kitchener bun. Durante la Primera Guerra Mundial, los australianos rebautizaron las berlinesas (unas bolitas de masa leudada y esponjosa de origen alemán) como Kitchener buns (panecillos Kitchener), también en honor de Lord Kitchener.

Roses of the Prophet Muhammad (rosas del profeta Mahoma). En 2006, durante la controversia por las caricaturas de Mahoma en el periódico danés Jyllands Posten, varios grupos iraníes abogaron por cambiar el nombre de los Danish pastries (pastelitos daneses) por el de Roses of the Prophet Muhammad.

12 comentarios:

marichuy dijo...

Querida Strika

Wow, me dejaste encantada con esta entrada, donde las "denominaciones de origen" se ven alteradas por cuestiones políticas.

Con excepción de las freedom fries y todo aquello derivado del sentimiento antifrancés, a raíz de las aventuras guerreras del Bush, de lo demás estaba en la ignorancia absoluta

"Caperucita encarnada"? jaja... me recordó a unos panistas mexicanos.

Besos originales

DRAMA QUEEN. dijo...

Interesante entrada Amiga...

sabes...bueno, quiza ni al caso, ya ves que sufro dixlesia mental jaja..pero por el camino que recorro para venir al trabajo no puedo evitar reir cuando veo un flamante letrero de venta de pollos que dice:
pollos estilo CHICKEN...!!

Saludos!!

Diana

BLUEKITTY dijo...

Muy interesante como siempre y la verdad no sabía nada de todo esto.


pd: me quedé pensando en lo de "pollo a estilo chicken" QUÉ es eso????

mario skan dijo...

Los conflictos también se resuelven a nivel linguístico, interesante, sería como borrar la identidad, la génesis o es la palabra la que funda nuevamente?

saludos

Ojaral dijo...

Mire qué cosa: en Argentina, durante la guerra de Malvinas, se prohibieron las canciones en inglés y se ignoraron majestuosamente los resultados de las selecciones británicas en el mundial de fútbol, pero la sopa inglesa siguió llamándose así en los restoranes. Y era el mismo asco de siempre.
Saludos!

Enrique dijo...

¿Y qué hay de aquellas palabras o nombres que vuelven a ser retomados después de mucho tiempo?
La ciudad rusa de San Petesburgo es un ejemplo. Primero se modificó a Petrogrado, luego se le cambio a Leningrado y finalmente cerca de 80 años después, regresó a ser San Petesburgo.

Enrique dijo...

Ahorita se me vino a la mente otro caso de este llamado “boicot”, con las dos estrofas suprimidas del Himno Nacional Mexicano.

La IV en honor a Santa Anna:
Del guerrero inmortal de Zempoala
Te defiende la espada terrible,
Y sostiene su brazo invencible
tu sagrado pendón tricolor.
Él será del feliz mexicano
en la paz y en la guerra el caudillo,
porque él supo sus armas de brillo
circundar en los campos de honor.

y la VII, en honor a Iturbide:
Si a la lid contra hueste enemiga
nos convoca la tropa guerrera,
de Iturbide la sacra bandera
¡Mexicanos! valientes seguid.
Y a los fieros bridones les sirvan
las vencidas enseñas de alfombra:
los laureles del triunfo den sombra
a la frente del bravo adalid.

Alicia R. dijo...

Sin embargo,yo recuerdo menúes con la rebautizada "Sopa Malvinas Argentinas" en lugar de la "Sopa inglesa" de siempre. Un beso.

gamaliel dijo...

Que "sensibilidad" la de algunas personas, no? como si ese tipo de actitudes permitiera cambiar algo...

Anónimo dijo...

No me dejas de impresionar con tus investigaciones lingüisticas, felicidades nuevamente.

Y se me ha ocurrido, que si en U.S.A. no lográn una reforma migratoria que deje de estar chingando a los mexicanos y latinoamericanos en general deberiamos empezar a llamarle al café americano, café latino y al futbol americano, futbol ignorante o el futbol de los idiotas.

Sandra Strikovsky (Strika) dijo...

Querida Marichuy: Ja, ja, ja. Sí, eso de la caperucita encarnada está muy chistoso. Podían haber encontrado otro sinónimo, ¿no? Besos carmesíes

Bluekitty: Pues creo que lo de los pollos estilos chicken sería un pleonasmo, ¿no? :P

Clandestina: Ja, ja, ja.

Mariano: Quizá sea un intento por borrar la identidad, aunque también creo que tiene que ver con el fenómeno del tabú. En todo caso, como dice Gamaliel, en el fondo no ganan nada.

Ojaral: "pero la sopa inglesa siguió llamándose así en los restoranes. Y era el mismo asco de siempre." Como casi toda la gastronomía inglesa, je, je. Creo que lo único rescatable que tienen es el crumble.

Enrique: De hecho, tengo pensado publicar una entrada sobre lo que mencionas de las ciudades, pero con otro enfoque. Sólo que no he encontrado muchos ejemplos aún... Y gracias por lo del himno. Tienes razón que ahí también hubo boicot. Un saludo

Alicia: Mira, qué interesante. Gracias por tu comentario. Un beso

Querido Gama: Exacto. Pero es como con los tabúes, los eufemismos y el mismo lenguaje políticamente correcto. Lo único que muestran esos fenómenos es la susceptibilidad de los hablantes, pero en el fondo no cambian nada.

J: Ja, ja, ja. Me encantó lo del fútbol de los idiotas. Gracias por pasar.

Sendos abrazos

e. r. dijo...

Lindísima entrada, Stricka! Es cómo ir a la escuela y que te enseñen solo cosas interesantes, jeje. Muchos saludos