En mi entrega pasada hice una pregunta sarcástica sobre cuántos hablantes nativos de esperanto hay que puedan juzgar la pronunciación de los actores de Incubus. Resulta que, como bien lo dijo el Diablo en los comentarios, contrario a lo que uno podría pensar, el esperanto sí tiene hablantes nativos. La cifra exacta es, sin embargo, difícil de precisar. Según cifras de Ethnologue (citadas en Wikipedia), en 1996 había entre 200 y 2000 hablantes nativos de esperanto. En un estudio también de 1996, Renato Corsetti, quien fuera presidente de la Asociación Universal del Esperanto de 2001 a 2007, señaló que únicamente había 350 denaskuloj, como se les conoce en esperanto a los nativos (significa innatos o desde el nacimiento).
Corsetti observa que en dichas familias son principalmente los padres quienes hablan esperanto con sus hijos, y que hay muy pocos casos documentados en los que las madres lo hagan. No todos los hablantes nativos son hijos de parejas que hablan diferentes lenguas y cuya lengua en común es el esperanto, como podría sospecharse en un primer momento. La mayoría de las familias que lo hablan en casa consisten de parejas que comparten la misma lengua materna y que deciden criar a sus hijos en esperanto. Al ser una lengua hablada por tan poca gente en el mundo, obviamente no existen esperantófonos monolingües.
El hablante nativo de esperanto más conocido es el especulador y filántropo húngaro George Soros (el hombre que “quebró el Banco de Inglaterra”). Otros denaskuloj célebres son Daniel Bovet, Premio Nóbel de Medicina o Fisiología en 1957, y las “hermanas Polgar”, las ajedrecistas más famosas del mundo.
Como lingüista aplicada, me llama muchísimo la atención este fenómeno de los hablantes nativos de esperanto. En los comentarios de la entrada pasada expresé algunas de mis inquietudes al respecto. Tratándose de una lengua construida, todo está basado en reglas diseñadas y establecidas por una academia de esperantistas. Además, al ser un idioma que suele ser aprendido, más que adquirido, sospecho que no hay una uniformidad en el habla de los esperantófonos. También me da mucha curiosidad cómo hablan quienes llegan a adquirir el esperanto como primera lengua.
Encontré un estudio empírico muy interesante de Benjamin K. Bergen, un lingüista de Berkeley, en el que se analiza el habla de ocho niños nativos de esperanto y se compara con el de un grupo de adultos que lo hablan como segunda lengua. Los niños entrevistados tenían diferentes adstratos (influencias), según la lengua materna de sus padres, y todos fueron criados en familias en las que al menos uno de los padres les habló en esperanto. El estudio tenía como objetivo observar en qué grado el esperanto de un nativo difiere del “esperanto estándar” (aquel establecido por la academia de esperantistas), así como del esperanto aprendido como segunda lengua.
Bergen encontró que el esperanto de los nativos difiere del estándar y del que lo hablan como segunda lengua en varios aspectos morfológicos, fonológicos y gramaticales que no mencionaré aquí para no hacerlo arduo. Basta con decir que los niños modifican muchas de las reglas del esperanto y hablan de un modo diferente que sus padres. Lo interesante del estudio es que se observó que las divergencias dependen de la influencia de la lengua materna de los padres, aun cuando éstos les hablen en esperanto a sus hijos. Por ejemplo, se observó que los niños cuyos padres eran francófonos tendían a no usar ciertos prefijos, a diferencia de los niños cuyos padres hablaban alemán. Pero además también se vio que en los nativos tienden a desaparecer ciertos casos gramaticales como el acusativo, que tantas discusiones han provocado entre los esperantistas (incluso por culpa del acusativo, hubo un movimiento separatista en 1907 que resultó en la creación de otra lengua artificial, el ido).
Al final, Bergen se pregunta: ¿qué tan probable es que las características del “esperanto nativo” se incorporen a la norma establecida por los esperantistas de la corriente dominante? Es muy poco probable porque la gran mayoría de los esperantistas no son nativos, y la mayoría de los nativos no se vuelven esperantistas activos. Pero los resultados del estudio parecen indicar que si el “esperanto nativo” se volviera la norma que se les enseña a los niños, muchas de las formas del esperanto actual terminarían por desaparecer, y seguramente surgirían diferentes dialectos, ya que habría mucha variación en su uso. En otras palabras, el esperanto se comportaría igual que cualquier otra lengua nativa, sea o no artificial. Pero eso nunca va a suceder. Y esa es la razón principal por la que no soy una entusiasta del esperanto.
Corsetti observa que en dichas familias son principalmente los padres quienes hablan esperanto con sus hijos, y que hay muy pocos casos documentados en los que las madres lo hagan. No todos los hablantes nativos son hijos de parejas que hablan diferentes lenguas y cuya lengua en común es el esperanto, como podría sospecharse en un primer momento. La mayoría de las familias que lo hablan en casa consisten de parejas que comparten la misma lengua materna y que deciden criar a sus hijos en esperanto. Al ser una lengua hablada por tan poca gente en el mundo, obviamente no existen esperantófonos monolingües.
El hablante nativo de esperanto más conocido es el especulador y filántropo húngaro George Soros (el hombre que “quebró el Banco de Inglaterra”). Otros denaskuloj célebres son Daniel Bovet, Premio Nóbel de Medicina o Fisiología en 1957, y las “hermanas Polgar”, las ajedrecistas más famosas del mundo.
Como lingüista aplicada, me llama muchísimo la atención este fenómeno de los hablantes nativos de esperanto. En los comentarios de la entrada pasada expresé algunas de mis inquietudes al respecto. Tratándose de una lengua construida, todo está basado en reglas diseñadas y establecidas por una academia de esperantistas. Además, al ser un idioma que suele ser aprendido, más que adquirido, sospecho que no hay una uniformidad en el habla de los esperantófonos. También me da mucha curiosidad cómo hablan quienes llegan a adquirir el esperanto como primera lengua.
Encontré un estudio empírico muy interesante de Benjamin K. Bergen, un lingüista de Berkeley, en el que se analiza el habla de ocho niños nativos de esperanto y se compara con el de un grupo de adultos que lo hablan como segunda lengua. Los niños entrevistados tenían diferentes adstratos (influencias), según la lengua materna de sus padres, y todos fueron criados en familias en las que al menos uno de los padres les habló en esperanto. El estudio tenía como objetivo observar en qué grado el esperanto de un nativo difiere del “esperanto estándar” (aquel establecido por la academia de esperantistas), así como del esperanto aprendido como segunda lengua.
Bergen encontró que el esperanto de los nativos difiere del estándar y del que lo hablan como segunda lengua en varios aspectos morfológicos, fonológicos y gramaticales que no mencionaré aquí para no hacerlo arduo. Basta con decir que los niños modifican muchas de las reglas del esperanto y hablan de un modo diferente que sus padres. Lo interesante del estudio es que se observó que las divergencias dependen de la influencia de la lengua materna de los padres, aun cuando éstos les hablen en esperanto a sus hijos. Por ejemplo, se observó que los niños cuyos padres eran francófonos tendían a no usar ciertos prefijos, a diferencia de los niños cuyos padres hablaban alemán. Pero además también se vio que en los nativos tienden a desaparecer ciertos casos gramaticales como el acusativo, que tantas discusiones han provocado entre los esperantistas (incluso por culpa del acusativo, hubo un movimiento separatista en 1907 que resultó en la creación de otra lengua artificial, el ido).
Al final, Bergen se pregunta: ¿qué tan probable es que las características del “esperanto nativo” se incorporen a la norma establecida por los esperantistas de la corriente dominante? Es muy poco probable porque la gran mayoría de los esperantistas no son nativos, y la mayoría de los nativos no se vuelven esperantistas activos. Pero los resultados del estudio parecen indicar que si el “esperanto nativo” se volviera la norma que se les enseña a los niños, muchas de las formas del esperanto actual terminarían por desaparecer, y seguramente surgirían diferentes dialectos, ya que habría mucha variación en su uso. En otras palabras, el esperanto se comportaría igual que cualquier otra lengua nativa, sea o no artificial. Pero eso nunca va a suceder. Y esa es la razón principal por la que no soy una entusiasta del esperanto.
16 comentarios:
Strika
"En otras palabras, el esperanto se comportaría igual que cualquier otra lengua nativa, sea o no artificial. Pero eso nunca va a suceder. Y esa es la razón principal por la que no soy una entusiasta del esperanto."
Muy bien dicho; y yo te secundo...
Saludos, esta entrada está muy, pero muy interesante. Gracias por tu dedicación.
Esta lengua acelero el tiempo. Sufrió en un siglo lo que debía padecer en siglos. Me sorprende que no haya desaparecido.
"Pero los resultados del estudio parecen indicar que si el “esperanto nativo” se volviera la norma que se les enseña a los niños, muchas de las formas del esperanto actual terminarían por desaparecer, y seguramente surgirían diferentes dialectos, ya que habría mucha variación en su uso."
Yo no creo que eso sea cierto. Lo que Bergen llama "esperanto nativo" sigue siendo Esperanto, solo que arman las oraciones de diferente forma e usan un vocabulario no tan común pero válido dentro de las reglas del idioma.(no hace falta ser un denaskulo para armar las oraciones de diferente forma, a todos nos influye nuestro idioma en algún grado)
Dada la flexibilidad del idioma para crear nuevas palabras mediante distintos afijos yo puedo inventar muchas palabras y que que mi interlocutor las entienda perfectamente tan solo conociendo la raíz.
Ulo: Bergen no se está refiriendo a palabras inventadas ni al orden de las oraciones, sino a formas gramaticales que desaparecen en el esperanto de los nativos. Particularmente, se refiere a la pérdida del caso acusativo. Él se pregunta qué pasaría si esos nativos se volvieran padres que les enseñan "su esperanto" (y no el de la norma) a sus hijos. Se pregunta si eso haría que el acusativo se perdiera por completo en la nueva generación. Y termina concluyendo que es muy probable que sí. Él analiza esto en el marco de los procesos de pidginización y creolización. Lo que pasa es que eso nunca va a suceder, porque no hay "comunidades" de esperantófonos nativos que sigan transmitiendo su lengua, y el esperanto se queda más bien dentro de una comunidad académica.
Pero yo estoy de acuerdo con la hipótesis de Bergen. Después de todo, en términos saussurianos, el "habla" es quien hace evolucianar a la "lengua".
Marichuy y Diablo: Gracias por sus comentarios. :)
Saludos
Estaría muy bueno que hubiese una escuela de lenguas en riesgo. Aunque no sean útiles como el inglés y (para mi pavor, ya que sólo hablo castellano y gracias) chino. Lenguas en riesgo, que estudiaríamos por el placer de estudiarlas y para senti que estamos rescatando algo del olvido.
(Y para pasarnos mensajes secretos que sólo entiendan nuestros compañeros de curso, muajajajaja...).
Me acordé de Wittgenstein
APrender un lenguaje esta profundamente entrelazado con su uso
"Uno no puede conjeturar como funciona una palabra, uno tiene que mirar su uso y aprender de el"
Felicidades y gracias Strika, un post muy interesante...
Ademas de los acentos, el mio es muy portugues, por la influencia de quienes lo aprendi.
caray! una esperantista menos, bueno, dos con marichuy...
Besos solitarios
A.
El esperanto como idioma internacional me parece una idea muy interensante y digna de apoyar; Sin embargo, creo que el inglés ya ocupa ese lugar desde hace décadas, lo que me recuerda en su “practicidad” al Calendario Republicano Francés (con sus debidas proporciones y excepciones).
En cuanto a las variaciones del idioma con respecto de una generación a otra creo que es imposible hablar con exactitud, ya que no hay un marco de referencia que no sea sólo la teoria del mismo. Creo que es más fácil detectar las variaciones en un dialécto indígena .
De todas formas me dio curiosidad el saber más del tema.
Anda, por segunda vez consecutiva voy a tener que promocionar mi web... porque también tengo un artículo sobre los hablantes nativos de esperanto! Qué casualidad.
Te lo dejo aquí: http://www.delbarrio.eu/2008/03/hablar-esperanto-como-un-nativo.htm (no me lo toméis como spam, es que es coincidencia)
Tienes una visión sobre el esperanto como algo rígido y construido que, la verdad, no es cierta. Es decir, no es un código, no es rígido. Te lo puedo decir por experiencia. No es muy distinto a hablar español normativo para alguien que habla un dialecto. Yo he tenido conversaciones en todo tipo de registros: formales, informales, humorísticas, agresivas, amistosas,... De hecho, a pesar de tu alusión a una "academia de esperantistas", debo decirte que los esperantistas hacemos incluso menos caso a nuestra Academia que los hispanohablantes a la RAE.
En cuanto al riesgo de dialectalización, se trata de una preocupación puramente teórica. Podría haber pasado hace muchos, muchos años, pero el incremento de las comunicaciones están conduciendo en todos los idiomas del mundo a una homogeneización interna, y el esperanto no es una excepción. Claro que hay ciertas diferencias entre los esperantistas dependiendo de su sustrato lingüístico, pero puedo asegurarte que menores que las que se encuentran en español.
Curiosamente, el problema principal de los hablantes nativos de esperanto no es ninguno de los que citas: es que los idiomas no se aprenden de los padres, sino de los amigos, y esto es lo más difícil para estos niños. Por eso algunos lo continúan usando y otros lo dejan al llegar la adolescencia.
Finalmente, disculpa que no haya entendido tu última frase: ¿por qué no eres entusiasta del esperanto? ¿porque se dialectalizaría? ¿o porque no llegará a dialectalizarse?
Hopolapa Strika querida:
Gracias a tus columnas e sabido de la existencia del Esperanto, volveré a ver el Gran Dictador que es una de mis películas favoritas para darme cuenta de lo que dices y también leer un poco al respecto.
Yo se hablar español que es mi lengua nativa y Gerigoncio lengua aprendida en el colegio jajajajaj….
Upun apabrapasopo grapandepe
chapaopo
Ganima
Tonyo: Gracias por tu comentario. El esperanto es una lengua construida o planeada, y en eso no hay discusión. Por otro lado todas las lenguas son códigos, y no hay nada malo en ello. Que sean códigos no significa que no pueda haber diferentes registros. Precisamente por eso hice alusión a la dicotomía saussuriana de lengua y habla (langue/parole). Una vez adquirido el código (o aprendido en el caso de los no nativos), uno puede usarlo de una manera absolutamente personal, de acuerdo con nuestros deseos, nuestras intenciones o nuestras emociones. Y, como bien dices, en el esperanto sucede lo mismo. Nunca dije lo contrario.
Pero es que yo no estaba hablando de registros en mi entrada, sino de los resultados de un estudio empírico en el que se comparó el habla de ocho niños nativos y el de un grupo de hablantes de esperanto como segunda lengua. Y de hecho los resultados muestran que el esperanto no es rígido.
En cuanto a la dialectalización, yo no lo veo como un "riesgo", sino como una riqueza. Pero entiendo perfectamente que los esperantistas lo vean como un riesgo porque contraviene el propósito principal del esperanto de servir como una lengua puente o auxiliar entre personas que hablan diferentes lenguas nativas.
Dices que "hay ciertas diferencias entre los esperantistas dependiendo de su sustrato lingüístico, pero puedo asegurarte que menores que las que se encuentran en español". Precisamente ese es el punto. El español, como otras lenguas, ha evolucionado a lo largo de los siglos y seguirá evolucionando. Puede que el esperanto vaya incorporando palabras nuevas y se adapte a los cambios que exige el momento, pero nunca podrá evolucionar de manera natural. Y la razón de ello la expones tú mismo: "los idiomas no se aprenden de los padres, sino de los amigos, y esto es lo más difícil para estos niños. Por eso algunos lo continúan usando y otros lo dejan al llegar la adolescencia". En otras palabras, no existen comunidades de esperantófonos nativos, y los cambios que se llegan a dar en la lengua son dictados por la academia y no por los hablantes nativos.
Y no soy entusiasta del esperanto por todo lo anterior y porque, como dije, nunca se va a comportar igual que otra lengua nativa (no llegará a dialectalizarse, entre otras cosas).
¡Sapalupudopos apa topodopos! :)
El esperanto siempre me pareció un juego de la inteligencia más bien caprichoso y estrafalario, cuyos objetivos de universalidad se vuelven risibles.
Seguramente conocés el artículo de Borges "El idioma analítico de John Wilkins", publicado en "Otras inquisiciones" donde analiza un caso similar.
Saludos admirados.
Strika: como ne me gusta mucho entrometerme donde no me llaman, no quería insistir mucho en el debate. Concedo que a quien no conoce el esperanto por dentro le pueda parecer lógico que una lengua planificada se mueva por parámetros distintos que una lengua étnica, pero te aseguro que no es así en la práctica. Estamos en un mundo moderno, y no en una sociedad de campesinos aislados, y la evolución de una lengua (de cualquiera) no se realiza de la manera en que nacieron los dialectos del latín o del español.
Por no enrollarme mucho, te remito a un texto que escribí hace unos meses en mi blog, y que trata de ese asunto: http://www.delbarrio.eu/2007/10/una-lengua-normal.htm.
Ojaral: cuando uno no conoce mucho el asunto de que habla debería evitar expresiones como "juego de la inteligencia más bien caprichoso y estrafalario" o adjetivos como "risibles". El esperanto no tiene nada que ver con el idioma de Wilkins. A quien esté interesado, recomiendo el libro "En busca de la lengua perfecta", de Umberto Eco, fascinante y fácilmente accesible.
Saludos
Tonyo: Qué bueno que mencionas el libro de La búsqueda de la lengua perfecta. Precisamente en él, Eco habla de una "evolución controlada" que mantiene al esperanto estándar. Es de eso de lo que he estado hablando todo el tiempo. Lamento mucho que no lo hayas entendido y que lo hayas tomado como un ataque.
Estrica
"Puede que el esperanto vaya incorporando palabras nuevas y se adapte a los cambios que exige el momento, pero nunca podrá evolucionar de manera natural."
No creo que eso sea cierto. Una vez leí que hay formas gramaticales que ha caído en desuso, que hoy en día tienden a ser expresado con estructuras diferentes. Un artículo de Wikipedia en inglés menciona cambios no solamente en el vocabulario sino de morfología y sintaxis. Los idiomas evolucionan porque los hablantes imitan unos al otros y la experiencia humana nos urge a expresar siempre nuevas cosas. Es raro que las normas escritas restrinjan mucho el uso cotidiano.
Un gugleo inicial me da esto: http://claudepiron.free.fr/articlesenanglais/evolution.htm y otra página menciona el aumento del uso de la terminación acusativa, el acortamiento del raíz -cio a -i, el cambio de anstataŭ y krom a ser usadas como conjunciones en vez de como preposiciones, el aumento del número de afijos, frases preposicionales juntadas y usadas como adverbios, etc. Así que me parece que, dado una comunidad lingüística bastante grande, evolucionarán los idiomas, sean o no nativos sus hablantes.
Strika, muy interesantes tus escritos sobre el esperanto y las lenguas...se ve que controlas. A ver si me pudieras sacar de una duda: ando buscando algo de bibliografía sobre las lenguas del mundo que explique su parentela y el funcionamiento interno ( ...aquello de flexiblas, aglutinantes, etc...que ya tengo muy olvidado). ¿Se te ocurre algún libro no demasiado profundo? Gracias.
Félix.
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